Después de la exposición de un diente afectado
No perturbe la herida. Si se colocó un apósito quirúrgico, déjalo en paz. El apósito ayuda a mantener el diente expuesto. Si se desprende o se cae, no se alarme.
Sangrado
Es normal tener algo de sangrado o enrojecimiento en la saliva durante las primeras 24 horas. Si hay un sangrado excesivo y su boca se llena rápidamente de sangre, puede controlarlo con presión sobre una gasa colocada directamente sobre la herida sangrante durante 30 minutos. Si el sangrado continúe, llame para recibir más instrucciones.
Hinchazón
La hinchazón es una reacción normal después de la cirugía. Para reducir la hinchazón, aplique una bolsa de hielo o una bolsa de plástico o una toalla con cubitos de hielo en la mejilla, en el área de la cirugía. Aplique el hielo de manera continua tanto como sea posible durante las primeras 36 horas.
Dieta
Beba abundantes líquidos. Evite líquidos o alimentos calientes. El día de la cirugía, debe consumir alimentos blandos y líquidos. Regresa a una dieta normal lo antes posible, a menos que se le indique lo contrario.
Dolor
Debe comenzar a tomar el medicamento para el dolor tan pronto como sienta que la anestesia local está desapareciendo. Para un dolor moderado, puede tomar 1 o 2 tabletas de Tylenol o Tylenol Extra Fuerte cada 3-4 horas. En lugar de Tylenol, también puede tomar ibuprofeno (Advil, Motrin). El ibuprofeno de venta libre viene en tabletas de 200 mg: puede tomar 2-3 tabletas cada 3-4 horas según sea necesario para el dolor. Para un dolor severo, debe tomar el medicamento recetada según las indicaciones.
Higiene bucal
La limpieza bucal es esencial para una buena cicatrización. Limpie bien su boca después de cada comida a partir del día siguiente a la cirugía. Cepille sus dientes lo mejor que pueda. Haga enjuagues con agua salada tibia (media cucharadita de sal en una taza de agua tibia) seis veces al día. Continúe con este procedimiento hasta que la cicatrización esté completa.
RECUERDE: Una herida limpia cicatriza mejor y más rápido.
Actividad
Reduzca al mínimo las actividades físicas inmediatamente después de la cirugía. Si está considerando hacer ejercicio, es posible que sienta latidos o sangrado. Si esto ocurre, debe dejar de hacer ejercicio. Tenga en cuenta que su ingesta normal de alimentos se reduce. El ejercicio puede debilitarlo. Si se siente mareado, deje de hacer ejercicio.